La policía usa gas pimienta en la protesta de Netanyahu frente al Capitolio de EE.UU.

WASHINGTON >> La policía usó gas pimienta contra algunos de los miles de manifestantes pro palestinos que se reunieron el miércoles frente al Capitolio de Estados Unidos mientras el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, hablaba ante el Congreso.

Poco antes de que Netanyahu comenzara a hablar, la Policía del Capitolio de Estados Unidos dijo que algunos manifestantes se habían vuelto violentos.

“La multitud no obedeció nuestra orden de retirarse de la línea policial. Estamos lanzando gas pimienta contra cualquiera que intente infringir la ley y cruzar esa línea”, dijo la policía en un comunicado.

Las protestas fueron pacíficas durante las primeras horas hasta aproximadamente media hora antes del discurso, cuando los manifestantes comenzaron una marcha y se enfrentaron a un bloqueo por parte de la policía que utilizó gas pimienta, hiriendo a algunos manifestantes.

Las autoridades habían cerrado el tráfico alrededor del Capitolio antes del discurso con medidas de seguridad inusualmente estrictas.

Netanyahu se refirió a los manifestantes que estaban afuera y dijo que tenía un mensaje para ellos. “Cuando los tiranos de Teherán que cuelgan a los homosexuales de grúas y asesinan a las mujeres por no cubrirse el cabello los elogian, los promueven y los financian, se han convertido oficialmente en los idiotas útiles de Irán”, dijo, utilizando un término de la era de la Guerra Fría para referirse a las personas que son manipuladas para lograr una agenda política.

En el escenario había carteles que decían que el líder israelí era un “criminal de guerra buscado”, en referencia a una orden de arresto solicitada por los fiscales de la Corte Penal Internacional. Netanyahu niega vehementemente las acusaciones de crímenes de guerra.

Cerca de allí, los manifestantes colocaron casi 30 ataúdes de cartón de tamaño humano envueltos en banderas palestinas. El tráfico estuvo cortado en varias carreteras cercanas al Capitolio.

“Quiero que se suspenda toda la ayuda a Israel debido a sus acciones en Gaza”, dijo Bradley Cullinan, quien dijo que viajó a la zona desde Columbus, Ohio, a 400 millas (640 kilómetros) de distancia.

La actriz ganadora del Oscar, Susan Sarandon, subió al escenario y condenó la cifra de muertos. “Nadie es libre hasta que todos seamos libres”, dijo Sarandon.

Decenas de legisladores demócratas no acudieron al discurso de Netanyahu ante el Congreso, expresando su consternación por las miles de muertes de civiles y la crisis humanitaria de la campaña de Israel en Gaza.

Miembros de un grupo judío ultraortodoxo llevaban banderas palestinas y carteles que decían “Palestina libre” y “El antisionismo no es antisemitismo”, mientras que un grupo de manifestantes más jóvenes bailaban al ritmo de música árabe y llevaban grandes pancartas que decían “Dejen de armar a Israel” y “Detengan los crímenes de guerra en Gaza”.

Grupos propalestinos y estudiantes universitarios llevan meses protestando en Estados Unidos contra la ofensiva de Israel en Gaza, un enclave gobernado por Hamás donde, según las autoridades sanitarias, casi 40.000 palestinos han muerto y casi la totalidad de sus 2,3 millones de habitantes han sido desplazados.

El asalto militar de Israel siguió a un ataque del 7 de octubre por parte de Hamás, cuyos militantes irrumpieron en Israel, matando a 1.200 personas y tomando alrededor de 250 rehenes, según cifras israelíes.

Los fiscales de la CPI dicen que hay motivos razonables para creer que Netanyahu y el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, así como los líderes de Hamas, Yahya Sinwar, Mohammed Al-Masri e Ismail Haniyeh, tienen responsabilidad penal por presuntos crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.