El jefe de defensa de Boeing se retira mientras el nuevo CEO realiza su primer gran movimiento

Boeing dijo hoy que el jefe de su problemática unidad espacial y de defensa dejará la compañía inmediatamente, en el primer cambio de gestión bajo el nuevo CEO Kelly Ortberg.

Ortberg, quien asumió el cargo en agosto, dijo que Ted Colbert se iría y Steve Parker, el director de operaciones de la unidad, asumiría las responsabilidades de Colbert hasta que se nombre un reemplazo en una fecha posterior.

“En este momento crítico, nuestra prioridad es recuperar la confianza de nuestros clientes y cumplir con los altos estándares que esperan de nosotros para permitirles realizar sus misiones críticas en todo el mundo”, escribió Ortberg en un correo electrónico a los empleados. “Trabajando juntos podemos mejorar y mejoraremos nuestro desempeño y nos aseguraremos de cumplir con nuestros compromisos”.

El negocio espacial de Boeing ha sufrido reveses significativos, en particular la reciente decisión de la NASA de enviar a casa la cápsula Starliner de Boeing sin astronautas, tras años de errores. Starliner le ha costado a Boeing 1.600 millones de dólares en sobrecostos desde 2016, según un análisis de Reuters de los documentos presentados ante el regulador bursátil.

La salida de Colbert se produce en un momento en que Boeing ha estado tratando de ahorrar dinero anunciando despidos de miles de trabajadores administrativos en medio de una huelga de más de 32.000 de sus trabajadores.

Boeing también se ha enfrentado a problemas importantes después de que en enero un nuevo 737 MAX 9 de Alaska Airlines sufriera una emergencia en el aire porque le faltaban cuatro pernos clave.

En julio, Boeing aceptó declararse culpable de un cargo de conspiración para cometer fraude criminal y pagar al menos 243,6 millones de dólares tras incumplir un acuerdo de enjuiciamiento diferido de 2021. El gobierno afirmó que Boeing hizo declaraciones falsas a sabiendas a la Administración Federal de Aviación sobre el software clave para el 737 MAX.

La FAA ha reforzado la supervisión de Boeing y le ha prohibido ampliar la producción del MAX más allá de 38 aviones por mes hasta que realice mejoras significativas en la calidad y la seguridad.

Parker fue contratado para reforzar el liderazgo industrial y ayudar a solucionar los programas deficitarios con un nuevo rol de gestión operativa hace poco menos de dos años. Anteriormente había dirigido los programas de bombarderos y cazas de Boeing, así como sus plantas de defensa de St. Louis.

“Históricamente, Boeing ha tenido una reputación superior por nuestra capacidad para gestionar programas, y debemos asegurarnos de que siga siendo un diferenciador clave para nosotros en el futuro”, escribió Ortberg en un correo electrónico separado a los empleados hoy.

Ortberg agregó que había aprendido “más sobre las futuras inversiones que necesitamos hacer para ser competitivos y definir nuestro futuro, así como sobre algunos de los obstáculos más inmediatos que enfrenta la ingeniería con la calidad y la ejecución por primera vez”.

Colbert, quien se unió a Boeing en 2009 después de trabajar en Citigroup y Ford Motor, tomó las riendas de Boeing Defense and Space en abril de 2022 después de que el anterior jefe de defensa fuera destituido.

La unidad de defensa, espacio y seguridad de Boeing, uno de sus tres negocios principales, perdió miles de millones de dólares en 2023 y 2022, lo que los ejecutivos atribuyeron en gran parte a los sobrecostes de los contratos a precio fijo.

Estos contratos tienen márgenes altos pero dejan a los contratistas de defensa vulnerables a las presiones inflacionarias que han afectado las ganancias corporativas estadounidenses en los últimos años.

Boeing ha perdido más de 2.000 millones de dólares en su retrasado programa de entrega de dos Boeing 747-8 altamente modernizados para su uso como avión presidencial estadounidense, conocido como Air Force One.

Las acciones de Boeing cerraron hoy con una caída de alrededor del 1% y han perdido alrededor del 41% en lo que va del año.